miércoles, 18 de noviembre de 2009

Cosas que han cambiado.

Precaución amigo conductor, la senda es peligrosa...
Si tu, como yo, has nacido en una época en la que no llevábamos los teléfonos móviles cerquita de los huevos, puede que te interese este "post". Adelante, adelante...

"Ey tio, ems kdad n ksa d kik xra bbr uns crvezs y dspues salr d fist"
Antes no se quedaba así. Bajabas a la plaza, y salías con quien te encontrases allí. Por lo que te convertías en una persona con un abanico de amigos importantes. Jevis, pijos, chicas, chicos...
Y entonces decidías lo que hacer. Antes si te aburrias, ibas a tocar los timbres de la gente y decías que habías perdido a tu mamá. A veces te reías porque era una vieja que se preocupaba demasiado, y otras porque tenías que correr porque alguien iba a bajar a darte unas ostias.
Ahora los chavales hacen lo siguiente: Se meten en un chat, se ponen el nombre que les permiten ponerse sus hormonas y adolescencia, (algo así como jovencitachupadora1982, o si son muy finolis debora69) y empiezan a chatear y a tomar el pelo a la gente. Aviso para navegantes: Ninguna tía buena ni tio bueno está buscando rolletes en un chat. Repito: No hay la más minima posibilidad de pillar con un bombón en un chat. Si quedas con alguien y tienes la suerte de que sea mujer u hombre (o los dos, depende de tus tendencias sexuales), nunca serán lo que esperas.

Quedar para ver porno:
Antes, te reunías con amigos alrededor del videoclub del barrio para decidir quién era el que parecía mayor de todos y que entrase a alquilar la porno de turno. Lo del aspecto mayor era inversamente proporcional al gusto para elegir películas dignas. Acabando viendo películas desagradables.
Ahora no, ahora los chavales tienen el porno a un click, (o a 200, entre que cierras la publicidad) viéndolo en la intimidad del hogar. Ya no se comentan las mejores jugadas. No hay moviola después de la película. No hay cine club, vaya.

Comprar discos:
Los discos ahora son un artículo de colección o para gente muy comprometida con la causa musical que no transige con la descarga de música. Yo como muchos otros, descargo música, pero como otros pocos también me gusta tener los discos de mis artistas favoritos.
Y digo yo, ¿no sería más fácil no querer lucrarse tanto con las ventas y acercarse un poco más al consumidor?. Dentro de nada en la entrada de la fnac se empezará a ver gente con carteles que recen lo siguiente:

HUNA HALLUDA POR FABOR
MI FAMILIA NO TIENE PARA KOMER NI PARA ESCUCHAR
EL HULTÍMO ZD DEL VISVAL